El presentador sinceramente compartió un aspecto íntimo de su vida al revelar que últimamente ha tenido dificultades para conciliar el sueño.

La causa de este insomnio resultó ser las disputas nocturnas entre su esposa e hija, una situación que le ha robado la paz en las horas de descanso.

Esta revelación, cargada de honestidad, proporciona un vistazo inesperado a la vida personal del conductor, mostrando que incluso las figuras públicas tienen sus propias batallas cotidianas.

La situación tomó un giro de compasión cuando Tanya Charry, colega del programa, expresó su simpatía hacia El Gordo y le cuestionó sobre cómo pasa esas noches en vela.

La pregunta no solo reveló el interés genuino de sus compañeros de trabajo por su bienestar, sino que también añadió un toque de intriga.

Ya que algunos en el set comenzaron a especular sobre las posibles actividades que podría estar llevando a cabo durante esas horas de insomnio.

Este episodio en la vida del conductor no solo destaca la conexión única que se forma entre los miembros de un equipo de trabajo.

Sino que también ofrece una perspectiva humana y vulnerable de una personalidad mediática que, por lo general, está acostumbrada a estar en el centro de la atención pública.

La audiencia, al conocer este aspecto más personal de El Gordo, puede sentir una conexión más profunda al reconocer la universalidad de los desafíos familiares y el impacto que pueden tener en la calidad del sueño y el bienestar general.

AQui el VIDEO de raúl de molina.