Ryan García ha vuelto a demostrar su capacidad para generar atención, pero esta vez es por todas las razones incorrectas.

El boxeador estadounidense de 25 años no logró alcanzar el peso requerido para su próxima pelea contra Devin Haney, lo que significa que ya no será elegible para competir por el título superligero de Haney.

Ryan García y Devin Haney protagonizan una acalorada discusión antes de que uno de ellos le dé una bofetada al otro.

García registró un peso de 1.4 kilogramos (3.2 libras) por encima del límite permitido, pesando 143.2 libras. En contraste, Haney logró cumplir con el límite de peso, pesando 140 libras (63.5 kg), y ahora ha comenzado un proceso controlado de rehidratación gestionado por SNAC, una empresa asociada con Víctor Conte.

García estaba increíblemente seguro de que alcanzaría el peso requerido.

Este contratiempo ha dañado significativamente la imagen de García, especialmente si tiene un desempeño deficiente en la pelea programada para el sábado.

Ha parecido fuera de lugar durante semanas, y su incapacidad para alcanzar el peso no solo le cuesta una oportunidad por el título, sino que también incurre en una multa financiera sustancial.

García tendrá que pagar una suma considerable de sus propios ingresos, no de los de sus promotores, debido a una apuesta realizada en la conferencia de prensa donde acordó pagar a Haney 500,000 dólares por cada libra de sobrepeso.

Con García excediendo el límite de peso por tres libras, ahora le debe a Haney 1.5 millones de dólares, según lo confirmado por ‘The Dream’.

Este giro de los acontecimientos pone una presión adicional sobre García mientras se dirige a la pelea, enfrentando tanto las consecuencias de su error de peso como las expectativas de sus fanáticos y críticos por igual.

Ha sido un momento extraño seguir la carrera de García, quien ha estado publicando mucho en las redes sociales desde el cambio de año.

Desde su admisión de haber visto actividades sectarias realizadas por la élite mundial, García también había afirmado que había sido testigo de un asalto sexual real a un menor.

Estas declaraciones parecen más que simples afirmaciones para generar interés en una carrera en el boxeo, y muchos han estado preocupados por la salud mental de García, con esas preocupaciones solo acrecentadas por esta incapacidad para alcanzar el peso para lo que habría sido una de las peleas más importantes de su vida profesional.